CATALUÑA CONTARÁ CON UN SERVICIO DE ATENCIÓN PSICOLÓGICA PARA VÍCTIMAS DE ACCIDENTES LABORALES

10 Jun 2008

Días atrás, diversos medios de comunicación se hacían eco del convenio de colaboración firmado recientemente entre el Departamento de Trabajo de la Generalitat de Catalunya y el Colegio Oficial de Psicólogos de Cataluña, para ofrecer apoyo psicológico a las víctimas de accidentes laborales muy graves y a los familiares de las personas fallecidas en los mismos.

 

Con este servicio, que contará con un grupo de psicólogos previamente seleccionados y formados por la entidad colegial catalana, se pretende atender a unas 500 personas anualmente, tal y como declaró a los medios de comunicación la Consellera Mar Serna.

Esta iniciativa, pionera en España, se pondrá en marcha a finales de junio o principios de julio de este mismo año, según las previsiones del Decano del COPC, Jaume Almenara, quien se mostró especialmente satisfecho por este acuerdo. Para el representante de la entidad colegial, este convenio no sólo supone darle el lugar que se les debe otorgar a los aspectos psicológicos en la atención a las víctimas de accidentes laborales graves, sino que también conlleva «el reconocimiento de la Psicología por parte de las Autoridades como una profesión que puede dar respuestas concretas y eficaces en distintos campos, como es el de la accidentalidad laboral». En este sentido, Almenara declaraba a Infocop que «estoy especialmente contento de que el Departamento de Trabajo de la Generalitat de Catalunya, a través de su Subdirectora General, Concha Pascual, haya tenido la iniciativa de ponerse en contacto con el Colegio de Psicólogos para proponernos trabajar en este interesantísimo proyecto de un servicio que no tiene precedentes en nuestro país».

En estos momentos el COPC está ultimando los detalles para poner en funcionamiento este servicio, contando inicialmente con el apoyo del grupo de psicólogos de catástrofes y emergencias, un equipo ya consolidado y en el que «se perfilará la intervención y se incorporará nuevo personal para dar cabida a la atención que ahora nos solicitan». En una primera fase se atenderá a las víctimas de accidentes laborales graves y sus familiares, aunque la idea es poder ampliar el servicio en un futuro e incorporar aspectos de prevención en el ámbito de la accidentalidad laboral, entre otros aspectos. En definitiva, lo que se pretende es atender «no sólo los aspectos emocionales con el objeto de reducir al máximo los efectos negativos de la accidentalidad laboral y conseguir cuanto antes la normalización de los afectados, sino también poder disminuir a medio plazo y largo plazo el número de accidentados en el ámbito laboral».

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