EVALUANDO LAS DIFICULTADES DE SOCIALIZACIÓN- ENTREVISTA A LOS GANADORES DEL XIII PREMIO TEA EDICIONES

4 Nov 2008

El pasado 16 de octubre tuvo lugar el acto de entrega del XIII Premio TEA Ediciones. Este año los galardonados han sido los profesores Óscar Herrero Mejías, Sergio Escorial Martín y Roberto Colom Marañón de la Universidad Autónoma de Madrid (UAM), por su trabajo titulado Escala de Dificultades de Socialización de Cantoblanco (SOC). 

Concebida para la evaluación de rasgos de personalidad asociados al desarrollo de conductas problemáticas, la Escala de Dificultades de Socialización de Cantoblanco se compone de tres escalas: «ausencia de miedo», «búsqueda de sensaciones» e «impulsividad». La SOC puede ser aplicada en distintos ámbitos (escolar, organizacional, clínico, etc.) y además, aporta una interesante novedad respecto a los instrumentos tradicionales de evaluación de la personalidad ya que el examinado debe elegir cada ítem entre dos situaciones alternativas propuestas, reflejando de este modo su nivel de rasgo en las variables evaluadas.

 
O. Herrero, S. Escorial y R. Colom

Con el objetivo de profundizar en la evaluación de las dificultades de socialización, Infocop Online ha querido entrevistar para sus lectores a los ganadores de esta XIII edición del Premio TEA Ediciones.

ENTREVISTA

Para comenzar, ¿Por qué surgió el interés en el estudio de las dificultades de socialización y la conducta antisocial?, ¿cómo podríamos definir este constructo?

El interés en el estudio de la conducta antisocial radica esencialmente en sus negativas consecuencias sociales. La conducta antisocial produce resultados de diversa gravedad (fraude fiscal, corrupción, conducción temeraria, robo con intimidación, agresión sexual, maltrato doméstico, asesinato, etc.) que repercuten en el bienestar de los miembros de la sociedad. Comprender el origen de la conducta antisocial es, por tanto, un objetivo al que la Psicología debe tratar de responder. Si, por ejemplo, logramos averiguar cuáles son los factores que desencadenan los episodios de maltrato doméstico, quizá se puedan articular algunos mecanismos de prevención e intervención.

En algún momento de la historia de la Psicología se pensó que bastaba con comprender los factores externos al individuo para ponerle coto a la conducta antisocial, pero desde hace algún tiempo se admite que es necesario recurrir también a factores personales. Entre esos factores personales se encuentran determinados rasgos temperamentales que, en una determinada combinación, hacen al individuo vulnerable a la conducta antisocial y dificultan el proceso de socialización. Una expresión elevada de búsqueda de sensaciones, impulsividad y ausencia de temor ante situaciones amenazantes interactúan con las condiciones del entorno para dificultar el proceso de socialización. Son esos rasgos básicos de la personalidad los que evalúa la Escala de Dificultades de Socialización de Cantoblanco (SOC).

En relación a la prueba de evaluación que habéis creado, ¿cuáles son las principales características y ventajas de la Escala de Dificultades de Socialización de Cantoblanco?, ¿qué mide exactamente, a qué población se puede aplicar, qué utilidades tiene, etc.?

La SOC es una prueba de evaluación breve que, además, usa un formato de respuesta que reduce significativamente la temida deseabilidad social y, por supuesto, los sesgos de respuesta basados en el contenido aparente de los tests de personalidad al uso. Pensamos que ambos aspectos son claras ventajas derivadas de las características de la escala. Además, queremos subrayar que la brevedad de la escala ha sido posible por el extenso trabajo que hay tras su elaboración, trabajo que ha permitido detectar con extraordinaria precisión los elementos realmente relevantes para evaluar aquello que se pretendía con la mayor economía posible de medios.

Mide, exactamente, tres factores de personalidad: búsqueda de sensaciones, impulsividad y ausencia de temor ante situaciones amenazantes. Al igual que el famoso Cuestionario de Personalidad de Eysenck (E.P.Q.), nosotros nos decantamos por evaluar rasgos esenciales para el objetivo perseguido. Y, al igual que sucede con el test de Eysenck, la consideración conjunta de los tres rasgos produce una rica información sobre la persona evaluada.

Su aplicación, como se comentó anteriormente, puede hacerse en los principales campos de la Psicología: educativo, clínico y organizacional. En el campo educativo, puede ayudar a predecir y comprender el bajo rendimiento de los estudiantes, así como las principales conductas disruptivas en el aula. En el clínico, puede contribuir a adaptar un determinado tratamiento y a comprender ciertas conductas problemáticas. Y en el organizacional, se podría emplear tanto en procesos de selección como en el análisis del clima organizacional y en la configuración de equipos de trabajo.

El instrumento de evaluación por el cual habéis sido galardonados con el XIII Premio TEA Ediciones está basado en la teoría de David Lykken sobre la conducta antisocial. ¿Cuáles son las principales aportaciones de este autor al estudio de la conducta antisocial?, ¿por qué seleccionasteis dicha teoría?, ¿se puede decir que los resultados de vuestras investigaciones confirman la teoría de Lykken?

La teoría de Lykken, igual que la SOC, no se limita a dar cuenta de la conducta antisocial, tal y como se puede concebir a primera vista. Su teoría ayuda a comprender fenómenos de naturaleza sociológica recurriendo al proceso interactivo que se produce entre determinados rasgos de la personalidad y el proceso de socialización. Lo que nos sedujo de su perspectiva fue el enorme apoyo empírico con el que contaba y la verosimilitud de esa aproximación interactiva. Su marco de referencia facilita la comprensión de los mecanismos que se encuentran detrás de conductas que resultan disruptivas, pero, además, ofrece una explicación sobre el origen de esas conductas, y, por tanto, facilita el poder pensar en programas de prevención e intervención.

En general, somos proclives a declarar que los datos que poseemos apoyan la teoría de David Lykken. Existen algunas inconsistencias, pero pensamos que los puntos a favor superan con creces a los puntos en contra.

A través de vuestras investigaciones habéis aplicado la prueba tanto en población reclusa como en estudiantes ¿Cuáles han sido los principales resultados que habéis obtenido?

Queremos aprovechar esta oportunidad para remarcar de nuevo que la SOC no está dirigida únicamente a población reclusa y a estudiantes, sino que posee un campo de aplicación mucho más amplio. Poseemos datos sobre estos dos grupos de población, pero también disponemos de una extensa base de datos sobre el comportamiento de la SOC en la población general. Las garantías técnicas de la escala se han estudiado con muestras de personas cuya edad oscila entre el periodo de la adolescencia y la vejez.

Los problemas de socialización poseen fuertes repercusiones durante el periodo de la adolescencia, pero sus efectos se dejan notar durante todo el ciclo vital. El uso de la SOC nos ha permitido comprobar que, en la escuela, existe una significativa mayor probabilidad de que los estudiantes, con una expresión elevada de los rasgos valorados por la escala, obtengan un rendimiento escolar insatisfactorio. De hecho, es un predictor tan poderoso como el logrado con las medidas de capacidad cognitiva. También hemos observado que la población reclusa obtiene puntuaciones significativamente más elevadas que la población general.

Pero la escala también puede ser de extraordinaria utilidad en la Psicología de las organizaciones. Por un lado, la naturaleza de la escala permite una evaluación que minimiza el sesgo debido a la deseabilidad social. Por otro lado, puede ayudar a detectar miembros de la organización que, con una determinada probabilidad, presentarán comportamientos disruptivos, dadas unas determinadas circunstancias, generarán conflictos o dinamitarán un proceso de negociación. Finalmente, en un proceso de selección, la SOC puede ser una original y sólida alternativa a las escalas al uso.

 

Para terminar, ¿deseáis añadir alguna cuestión más de interés?

Tres cosas. En primer lugar, el proceso de elaboración de la SOC ha sido posible porque existía una sólida teoría sobre los rasgos de la personalidad evaluados. Este hecho demuestra que la teoría en Psicología puede facilitar el desarrollo de aplicaciones valiosas para el profesional. El psicólogo aplicado no debería, a nuestro juicio, mirar con suspicacia a los teóricos de la Psicología. Se necesitan mutuamente.

En segundo lugar, la evaluación de la personalidad lleva tiempo siendo cuestionada, fundamentalmente por el modo en el que se formulan las preguntas que permiten alcanzar un determinado diagnóstico o perfil. Pensamos que la SOC emplea un método diferente que puede contribuir a superar las suspicacias de los usuarios, y somos de la opinión de que debería incrementarse la búsqueda de esas vías alternativas de evaluación.

Finalmente, deseamos agradecer a TEA su confianza en los autores del país. Seguro que no somos los únicos que pensamos así. En un mercado agresivamente competitivo, en el que resulta más cómodo apostar por el producto «seguro» de carácter multinacional basado en presuntos grandes nombres y corporaciones, el equipo de TEA apuesta por el producto nacional de calidad y facilita su puesta en un mercado que, realmente, puede ser mucho más amplio de lo que pensamos. Su valentía es un modelo para otras compañías.

PSICOLOGÍA EN RED


LOS COLEGIOS HABLAN

MÁS NOTICIAS