Claves para la reincorporación de menores supervivientes de cáncer

15 Feb 2023

El diagnóstico de cáncer tiene un enorme impacto psicológico para los pacientes pediátricos y sus familias, generando una situación crítica en el entorno familiar. Las exigencias para adaptarse a la enfermedad y el tratamiento constituyen una fuente de estrés continua que puede provocar un enorme sufrimiento psicológico y un intenso desgaste, así como una reducción de la calidad de vida de todas las personas del grupo familiar. Con el objetivo de proporcionar pautas basadas en la evidencia sobre atención en salud mental en menores con cáncer y sus familias, la Organización Panamericana de la Salud junto con la Organización Mundial de la Salud y otras asociaciones internacionales,  han publicado la Guía Atención de la salud mental del cáncer pediátrico.

Tal y como advierte el documento, las intervenciones a nivel psicológico “suelen ser escasas y se centran en los problemas que han aparecido durante el período de tratamiento, y muchas veces se dejan de lado las acciones orientadas a promover la adaptación de los pacientes una vez finalizado el tratamiento”.

 

Fuente: www.pexels.com Artista:
thirdman Fecha descarga: 12/09/2022

Después del cáncer, existen diferentes obstáculos para la integración plena de los menores en su vida social, de juego y de aprendizaje. En este sentido, el cáncer y el tratamiento han supuesto una serie de limitaciones en la interacción social de los menores, debido a los periodos de hospitalización o aislamiento o las exigencias del tratamiento, que suelen durar entre 8 y 12 meses. “Esto puede hacer que los pacientes se vean como diferentes a sus amigos y compañeros y que surjan sentimientos de soledad”, se indica en la guía.

La interrupción del curso escolar también supone una dificultad añadida en su socialización y aprendizaje, pudiendo tener un impacto negativo en su seguridad y autoestima.

Por otro lado, es común que los menores presenten secuelas en el crecimiento, desarrollo y maduración sexual, así como deterioro en su capacidad cognitiva, entre otros, tras el tratamiento oncológico, lo que también tiene un efecto en su bienestar psicológico y una serie de implicaciones en su cuidado posterior.

La guía ofrece una serie de recomendaciones en la intervención psicológica y social dirigidas a promover y facilitar la reincorporación de los menores tras un tratamiento oncológico y un conjunto de pautas para ponerlas en marcha.

La guía se puede descargar en el siguiente enlace:

Recursos para la reincorporación progresiva a la vida cotidiana

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