Los psicólogos de emergencias galardonados por su labor durante el accidente de Santiago

29 Oct 2013

El pasado sábado 26 de octubre, el Grupo de Intervención Psicológica en Catástrofes y Emergencias (GIPCE), perteneciente al COP Galicia, recibió la Placa de Honor de la Orden del Mérito Civil, en un acto solemne de reconocimiento al trabajo realizado durante la catástrofe ferroviaria acaecida el pasado 24 de julio en Santiago.

El GIPCE es un grupo que se puso en marcha en 1996 con profesionales especializados en la atención psicológica en situaciones de catástrofe y emergencia. Con su intervención procura minimizar el impacto en las personas afectadas, restaurando sus capacidades y recursos para que puedan resolver más eficazmente la situación de estrés y prevenir posibles problemas psicológicos posteriores.

Su coordinadora, Ana Isabel Martínez Arranz, recogió esta distinción otorgada por el rey y propuesta por el Ministerio de Fomento por la «generosidad» y «ejemplaridad» mostradas durante la tragedia.

 

El acto, celebrado en el Auditorio de Galicia (Santiago de Compostela), comenzó con un minuto de silencio en honor a las víctimas del accidente ferroviario, tras el cual, el presidente de la Asociación de Perjudicados por el Accidente Ferroviario del Alvia, Cristóbal Rabadán, hizo un reconocimiento tanto a los vecinos de Angrois como a todos los organismos que participaron en las labores de rescate, realizando una petición: «Que no se nos olvide, que no se nos abandone».

Por otro lado, el pasado 25 de octubre, el COP Murcia decidió reconocer también el trabajo desarrollado por el GIPCE durante el siniestro ferroviario, otorgándole el Galardón de la Psicología Murciana 2013.

La decana del COP Galicia, Rosa Mª Álvarez Prada, recogió esta distinción en reconocimiento a la encomiable labor realizada por el Grupo de Emergencias de su Colegio en la atención psicológica de los afectados por el accidente de Santiago, manifestando que «la gestión de la tragedia de Angrois fue el resultado de 17 años de formación, de entrenamiento, de aumento de las intervenciones, de las exigencias internas».

Asimismo, señaló que «desde la primera noche del accidente y hasta el sepelio de las personas fallecidas, los equipos de psicólogos estuvieron trabajando con una enorme capacidad de esfuerzo y una responsabilidad encomiable».

PSICOLOGÍA EN RED


LOS COLEGIOS HABLAN

MÁS NOTICIAS