La Psicología Clínica desaparece de la moción sobre política en Salud Mental aprobada en Castilla y León

28 Feb 2017

El pasado mes de enero, se publicó en el Boletín Oficial de las Cortes de Castilla y León, la aprobación por el Pleno de una Moción formulada por el Grupo Parlamentario Podemos Castilla y León, sobre política general en materia de salud mental.

Durante la sesión plenaria, Podemos presentó su iniciativa haciendo referencia a la definición sobre salud mental que hace la OMS, para insistir en la necesidad de tratar este tema y la trascendencia de abordar integralmente algunas cuestiones que, a su juicio, “no son atendidas de manera eficiente en la gestión de la salud de Castilla y León y en la gestión de los servicios sociales”.

En esta línea, enumeró una serie de normativas (a saber: la Estrategia Regional de Salud Mental y Asistencia Psiquiátrica, el IV Plan de Salud, el II Plan de Asistencia Sociosanitaria, y las directrices del modelo de atención sociosanitaria para personas con discapacidad por enfermedad mental), para poner de relieve los diferentes inconvenientes comunes a todas ellas, tales como “falta de renovación o falta de cumplimiento de objetivos o con análisis sesgados, o bien con una mezcla de todos estos componentes”.

De este planteamiento, en que “no se están cumpliendo los objetivos”, surge la moción de Podemos, que tal y como ya informó Infocop Online en su momento, se materializaba en 17 puntos, en tres de los cuales se hacía referencia expresa a la Psicología Clínica, concretamente los siguientes:

“5) Dotar a estos Equipos [punto 4: ‘…de salud mental, entendidos como un modelo sociosanitario en un equipo multidisciplinar…’], de un número suficiente de personal de Psicología Clínica y enfermería especialmente.

6) Dotar a la Atención Primaria de personal de Psicología Clínica y Psiquiatría con el fin de desbloquear la carga de trabajo en médicos de Atención Primaria y las listas de espera de estas especialidades.

17) Instar al Gobierno de España a aumentar las plazas PIR para dotar de Psicología Clínica suficiente los centros sanitarios de Castilla y León.”

El Grupo Parlamentario finalizó su presentación recordando que “en nuestra sociedad se hace inevitable abordar la cada vez mayor prevalencia de trastornos psicológicos”, por lo que es necesaria “más psicología atendida desde la Primaria para liberar de esa carga a médicos y médicas, y para acabar con las listas de espera”.

Por su parte, Ciudadanos puso de relieve la similitud “-no en la redacción, pero sí en el objetivo de mejorar la salud mental-”, entre esta iniciativa y su Proposición No de Ley (por la que se insta a la Junta a adoptar las medidas que se solicitan para una adecuada cobertura de los tratamientos psicológicos en el Sistema de Salud), destacando algunos puntos de coincidencia entre ambas, primordialmente, en torno a los tres puntos anteriormente mencionados, así como de desacuerdo, por ejemplo, la dotación de psiquiatras en Primaria, una medida que, a su juicio, carece de sentido al tratarse de “dos niveles de intervención distintos”.

La intervención de este Grupo Parlamentario finalizó remarcando “uno de los aspectos fundamentales de la moción”: la integración de la salud mental en Atención Primaria, dada la importante carga asistencial que suponen para el Sistema Sanitario los problemas psicológicos, y el elevado porcentaje de consultas en Atención Primaria relacionadas con algún problema de esta índole, la mayoría de los cuales son tratados con psicofármacos por los médicos de familia, a pesar de los evidentes beneficios de los tratamientos psicológicos en términos de coste-eficacia.

A lo largo de la sesión, el resto de Grupos manifestó su acuerdo con la moción debatida, si bien fueron añadiendo diversas modificaciones en algunos puntos.

La última intervención correspondió al Grupo Parlamentario Popular, que comenzó introduciendo una serie de datos sobre las enfermedades mentales en España y el modelo de atención a la misma en Castilla y León, pasando a señalar que pese a “estar ideológicamente lejos”, apoyaban todos los puntos de la moción excepto 6 de ellos, entre los que se incluían aquellos relacionados con la Psicología Clínica. A este respecto, el PP rechazó el punto 5 por no querer “dejar simplemente constreñido el tema de los profesionales que deben de formar los equipos de salud mental”, considerando más importante potenciar los equipos con trabajadores sociales. Asimismo, recomendaba cambiar el punto 6 por el impulso a “la formación y capacitación de los profesionales de Atención Primaria para atender aquellos procesos… con técnicas cognitivas y técnicas conductistas de aquellos procesos psicológicos”. En lo que se refiere a la petición de elevar la cifra de plazas PIR en Castilla y León, expresó su aquiescencia con la misma únicamente en caso necesario, no siéndolo, a su parecer, en la actualidad.

Previo a la votación, Podemos aceptó las enmiendas de los diferentes partidos, en especial, las de Ciudadanos, incidiendo en la conveniencia de incluir la Psicología en Atención Primaria, tal y como ya se está haciendo en otros países europeos.

Los diferentes puntos de la moción se votaron por separado a petición del PP, resultando aprobados todos menos siete, entre los que, lamentablemente, se encontraban aquellos referentes a la Psicología Clínica, dejando así patente el largo camino que aún queda por recorrer en pro del reconocimiento –y aceptación- real de la importancia de la misma, especialmente, dentro del primer nivel asistencial del Sistema Nacional de Salud.

La Resolución relativa a la Moción quedó redactada como sigue:

«Las Cortes de Castilla y León instan a la Junta de Castilla y León a:

1. Proceder a un análisis previo de la situación de implantación de recursos en el territorio, incidencia de casos, diferenciación de enfermedades y trastornos; desagregado entre mundo urbano y rural y por provincias en materia de salud mental.

2. Analizar las conclusiones del III Plan de Salud respecto a los objetivos no conseguidos para aplicar alternativas en el IV Plan de Salud.

3. Realizar un Programa de Gestión de Casos específico para las personas con enfermedad mental con el fin de evitar mezclar las situaciones de exclusión social.

4. Establecer nuevos programas desde la Consejería de Sanidad de concienciación y divulgación sobre las enfermedades mentales participado con las asociaciones de salud mental con el fin de eliminar los prejuicios y la estigmatización de estas enfermedades.

5. Cubrir integralmente el número de plazas residenciales sociosanitarias necesarias para personas con enfermedad mental en todas las provincias de Castilla y León con carácter público o mediante concierto con entidades sin ánimo de lucro.

6. Disponer de otras prestaciones sociosanitarias más allá de las residenciales; centros de día, específicos para personas con enfermedad mental, centros de terapias o similares.

7. Agregar la figura de asistente personal a las prestaciones para personas con enfermedad mental.

8. Implementar programas de recuperación psicosocial y laboral, coordinados entre la Consejería de Sanidad, la Consejería de Familia e Igualdad de Oportunidades y la Consejería de Empleo.

9. Disponer de un sistema de control y evaluación anual de los recursos humanos y materiales, las medidas llevadas a cabo y la consecución de objetivos a lograr.

10. Integrar la perspectiva de género en todo el proceso: desde el análisis previo hasta la evaluación final para conocer y atender el sesgo de género en esta materia».

Para acceder al texto de la sesión plenaria, pincha el siguiente enlace (pág. 4566):

Moción, M/000179, que presenta el Grupo Parlamentario Podemos Castilla y León, derivada de la Interpelación formulada a la Junta de Castilla y León por dicho Grupo Parlamentario, sobre política general en materia de salud mental, sustanciada en la sesión plenaria de 13 de diciembre de 2016

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