Participación comunitaria para mejorar la salud y el bienestar y reducir las desigualdades, nueva guía

9 Ene 2020

“La salud y las enfermedades dependen más de nuestro código postal que de nuestro código genético. Nuestra esperanza de vida es de las más altas de Europa y, sin embargo, vivimos muchos de estos años con mala salud. Precisamos de entornos y condiciones de vida saludables para poder vivir más años con buena salud”.

Con esta introducción, se presenta una guía realizada por el Nodo Madrileño del Proyecto Adapta GPS, el proyecto comunitario Mapeando Carabanchel Alto y el Área de Promoción de la Salud del Ministerio de Sanidad, Consumo y Bienestar Social, consistente en una versión accesible de la guía «Guía Participación Comunitaria: Mejorando la salud y el bienestar y reduciendo desigualdades en salud» (desarrollada en 2018 por el Grupo de Trabajo del Proyecto AdaptA GPS para adaptar al contexto español las recomendaciones de la Guía NICE NG44: “Community engagement: improving health and wellbeing and reducing health inequalities”).

Bajo la premisa de mejorar la salud y el bienestar y reducir las desigualdades sociales en salud, se ha elaborado esta nueva guía, para que estas recomendaciones NICE basadas en la evidencia, sean más accesibles a todas las personas, profesionales y no profesionales de la salud, con un lenguaje común y comprensible, sin tecnicismos que pudieran dificultar los posibles beneficios de estas pautas, en aras de alcanzar una participación realmente eficaz para ganar salud y equidad.

Las pautas describen los pasos y elementos imprescindibles para trabajar de manera conjunta entre administraciones públicas, organizaciones comunitarias y tejido social en la planificación, desarrollo de proyectos y programas, así como en la evaluación de los mismos para la mejora de la salud y el bienestar de la comunidad local.

La guía se estructura en 5 apartados, correspondientes a las recomendaciones NICE:

  1. Principios generales de buena práctica.

  2. Cooperación y alianzas para responder a las necesidades, recursos y prioridades locales.

  3. Facilitar la participación de la ciudadanía para identificar necesidades, recursos y prioridades locales.

  4. Enfoque local para que la participación comunitaria esté integrada en las actuaciones sobre la salud y el bienestar.

  5. Hacer que las personas se puedan implicar de la forma más fácil posible.

Tal y como señalan los autores del documento, las decisiones para implementar estas recomendaciones no solo deben ser tomadas a nivel técnico y político, sino también –y con el fin de que sean de utilidad a todas las personas-, deben contar con la participación de toda la comunidad, tanto en el proceso de decisión como en su puesta en marcha y evaluación.

Con la participación, afirman, “también mejoramos nuestras relaciones y ampliamos nuestras redes sociales, aspectos muy importantes para nuestra salud”. Así, esta nueva forma de abordar la salud precisa de concienciar sobre la participación comunitaria como instrumento eficaz para mejorar los resultados y de mostrar las ventajas de trabajar de forma conjunta.

Se puede acceder al nuevo manual desde la página Web del Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, o bien directamente a través del siguiente enlace:

Participar para ganar salud. Versión para todos los públicos de la Guía Participación Comunitaria: Mejorando la salud y el bienestar y reduciendo desigualdades en salud. Madrid: MSCBS-IACS-FEMP-RECS; 2019

PSICOLOGÍA EN RED


LOS COLEGIOS HABLAN

MÁS NOTICIAS