La invisibilidad de la violencia de género en el entorno rural

30 Oct 2020

Cerca de 8 de cada 10 mujeres víctimas de violencia de género, que viven en entornos rurales en España, manifiestan haber sufrido violencia física por parte de su pareja. Este es uno de los resultados del estudio realizado por la Federación de Asociaciones de Mujeres Rurales (Fademur) en colaboración con el Ministerio de Igualdad, presentado el pasado 16 de octubre.

El estudio, el primero centrado en el análisis del impacto de la violencia de género en el entorno rural, se ha llevado a cabo con los datos de encuestas y entrevistas realizadas a 167 mujeres, a 333 profesionales de atención y a 23 mujeres usuarias de servicios de atención a víctimas de violencia de género, residentes en municipios con menos de 20.000 habitantes de las comunidades de Andalucía, Aragón, Castilla y León, Castilla-La Mancha, Extremadura, Galicia y La Rioja.

Fuente: www.pexels.com Artista:
Kat Jayne Fecha descarga: 19/10/2020

Del total de mujeres encuestadas, el 61,3% afirmó conocer a alguna mujer víctima de este tipo de violencia en su entorno, y que estas mujeres habían sido víctimas tanto de violencia psicológica (96,3% de los casos), como física (92,7%).

Dentro del grupo de mujeres víctimas de violencia de género, el tipo de violencia de género más frecuentemente informado por estas mujeres ha sido el maltrato psicológico (presente en un 100% de los casos), seguido del maltrato físico (78,2%), la violencia económica (56,5%), la violencia sexual (39,1%) y la violencia ambiental (34,7%), entendida como el clima de permisividad percibida por la mujer en el entorno cercano hacia este tipo de violencia.

Son numerosos los obstáculos que frenan a estas mujeres la posibilidad de obtener ayuda, entre los que se incluye no sólo la dependencia económica del agresor, sino otras circunstancias propias del entorno rural, como el miedo a ser juzgadas por el entorno, el desconocimiento de los tipos de recursos de protección y atención disponibles o la desconfianza en que este tipo de ayudas puedan ser de utilidad. Asimismo, las mujeres víctimas de violencia de género del entorno rural presentan una gran dificultad para reconocer las diversas formas de violencia de género y para sentirse identificadas con este tipo de violencia. En concreto, aunque el 78,8% afirmó conocer las campañas institucionales contra la violencia de género, el 83,3% no se sintió identificada con este tipo de víctimas.

Según los autores del informe, una de las principales conclusiones que se puede extraer de los datos es la dificultad de estas mujeres para acceder a recursos y ayuda, de forma que las situaciones de violencia se alargan en el tiempo (la media de permanencia en relaciones de violencia en este grupo fue de 20 años) y el problema permanece oculto o invisible en la mayor parte de los casos.

De esta manera, para mejorar las posibilidades de protección de las mujeres del entorno rural frente a la violencia de género, Fademur propone una serie de recomendaciones, entre las que se incluyen:

  1. El reforzamiento de las medidas de prevención y sensibilización, por ejemplo, incorporando el problema de la violencia de género dentro del contenido curricular de los centros educativos de estos municipios.
  2. La ampliación de recursos especializados en violencia de género, de forma que estos pueblos rurales puedan tener acceso a una atención integral en violencia de género.
  3. La mejora de la formación en materia de violencia de género de los profesionales y técnicos que pueden llegar a atender a estas mujeres, puesto que se evidencia la carencia de habilidades y de conocimiento necesario para prestar una ayuda de calidad.
  4. La mejora de las vías de coordinación y colaboración interinstitucional entre los agentes sociales intervinientes.
  5. La inversión en estudios de investigación para profundizar en el conocimiento de los factores que afectan a la violencia de género en el entorno rural.
  6. El desarrollo de políticas públicas específicas sobre el problema de la violencia de género en el entorno rural, a través de un compromiso económico coherente y ajustado a las necesidades reales de la población rural.

Se puede acceder al informe en el siguiente enlace:

Mujeres víctimas de violencia de género en el mundo rural

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