Tal y como indica la guía, una comunidad sensibilizada e informada es el punto de partida para la prevención del suicidio, dado que es básico reconocer las demandas de auxilio explícitas e implícitas de cara a actuar de forma más precoz y adecuada.
Como bien señalan sus autores, el suicidio es prevenible. A este respecto, el documento recoge una serie de aspectos importantes para la prevención del suicidio en tres niveles (prevención primaria, secundaria y terciaria), así como para su detección (factores de riesgo).
La guía incluye también una serie de recomendaciones generales sobre actitudes positivas y actitudes negativas que es importante evitar y un protocolo de actuación en caso de muerte por suicidio cuyos objetivos son minimizar los efectos negativos, a corto y largo plazo, del trauma que supone la pérdida por suicidio, reducir el sufrimiento psíquico y el peligro de imitación de los y las jóvenes más vulnerables, facilitar el proceso de duelo, etc.
La guía se encuentra disponible (en catalán) en la página Web del Consejo Nacional de la Juventud de Cataluña, o bien directamente a través del siguiente enlace:
Hagamos frente al suicidio juvenil: herramientas y directrices para las entidades juveniles |