Por este motivo, los expertos señalan que las estrategias de prevención actuales (dirigidas a adolescentes) son necesarias, pero no suficientes para prevenir eficazmente el riesgo de consumo de sustancias.. Un planteamiento más acertado sería ampliar el rango de medidas de prevención a todos los actores de la unidad familiar (padres, niños…) desde la primera infancia. Asimismo, estas estrategias de prevención deberían centrarse no tanto en la reducción de riesgos, sino en la promoción de la salud y de la resiliencia frente al consumo de drogas y considerar todo el abanico de factores que influyen en el consumo, más allá de los factores individuales.
A este respecto, los autores del informe destacan el papel de la pobreza y exclusión social, las experiencias adversas en la infancia (trauma) y la enfermedad, de forma que si se construyen programas de prevención que aseguren una primera infancia en condiciones óptimas y unas pautas de crianza positivas de los padres se puede mejorar considerablemente el éxito de los niños y niñas vulnerables frente al consumo de sustancias en etapas posteriores. “Al intervenir antes y de manera más amplia, podemos prevenir mejor el consumo de sustancias en la adolescencia y las innumerables consecuencias dañinas y nocivas para la salud asociadas con él”, indican los autores.
En la publicación se plantea una propuesta de acción que integra los conocimientos científicos en materia de consumo de drogas con el desarrollo de la primera infancia y el desarrollo saludable de los jóvenes. Asimismo, se describe la evolución histórica sobre la prevención en consumo de sustancias, el papel de los diferentes agentes asistenciales y la importancia de ofrecer intervenciones multidisciplinares y complementarias a diferentes niveles de intervención. Los expertos hacen un llamamiento a los responsables de las políticas de salud pública para que adopten un enfoque más amplio y de intervención temprana para proteger a los jóvenes frente al uso de sustancias y de los problemas de adicción.
La publicación está especialmente dirigida a responsables de las políticas de salud pública, pero también es de interés para los profesionales sanitarios y sociales, así como para los investigadores interesados en la prevención del uso de sustancias y de la promoción de la salud en jóvenes.
Se puede descargar el documento en el siguiente enlace:
Rethinking Substance Use Prevention: An Earlier and Broader Approach |