Envejecimiento cognitivo y funcionamiento cotidiano: la evaluación de la cognición cotidiana a través del PECC
23 Jul 2014
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Diariamente realizamos diferentes tareas que nos permiten vivir de manera independiente, sin la ayuda de otras personas. Algunas de estas tareas están relacionadas con el autocuidado como vestirse, alimentarse o asearse, y se denominan actividades básicas de la vida diaria. Sin embargo, otras tareas son más complejas, tienen un carácter instrumental y están estrechamente relacionadas con el funcionamiento cognitivo. Tareas como preparar la comida, realizar la compra en el supermercado, recordar una cita médica, comprender un informe médico o usar el transporte público, nos permiten vivir de manera independiente en la comunidad. La mayoría de las veces, el deterioro de las actividades instrumentales de la vida diaria (AIVD) pasa desapercibido, hasta que dejamos de relacionarnos con los demás o no participamos en actividades sociales. Por lo tanto, detectar las situaciones de dependencia en las AIVD se ha convertido en un objetivo primordial en la práctica socio-sanitaria. La prueba para la evaluación de la cognición cotidiana (PECC) es el resultado de un trabajo de investigación que analiza los efectos del envejecimiento cognitivo sobre las AIVD en una muestra de personas mayores de 60 años sin deterioro cognitivo. El PECC permite discernir si la persona evaluada tiene deteriorada su capacidad para realizar tareas cotidianas cognitivamente demandantes. |
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A lo largo de la prueba, la persona tiene que resolver diferentes situaciones-problema utilizando un material que le proporciona el evaluador. Dichas situaciones-problema se corresponden con 12 tareas cotidianas agrupadas en 6 áreas: uso de medicación y gestiones sanitarias, gestiones administrativas, gestiones financieras, preparación de la comida, uso del transporte y compras. De este modo, la capacidad de las personas mayores para vivir de manera independiente podría estar seriamente comprometida si tuviesen problemas o no fuesen capaces de gestionar su propia medicación, rellenar un impreso de solicitud, comprender una factura o la libreta del banco, seguir las instrucciones para hacer una receta de cocina, comprender un horario de autobuses o trenes para desplazarse a otro lugar, o recordar los ingredientes que tienen que comprar para hacer la comida. Una característica sobresaliente y novedosa del PECC es que se pide a las personas mayores que realicen las diferentes tareas utilizando un material muy similar al utilizado en la vida diaria, frente a otras escalas de evaluación en las que prima únicamente la apreciación que tienen las personas sobre su propio rendimiento. Además, las tareas que componen el PECC están relacionadas entre sí, de tal forma que para resolver una tarea es necesario utilizar la información y los materiales de tareas anteriores. Por otro lado, las tareas forman parte de un relato sobre dos personas que tienen que realizar diferentes actividades (ir al médico, prepararse la medicación, rellenar un impreso de solicitud, etc.). Otra característica importante de la prueba es que incorpora dos tareas de memoria prospectiva. Su introducción viene motivada por el hecho de que este tipo de memoria está muy presente en nuestra vida diaria dado que son muchas las situaciones en las que tenemos que posponer una acción que no podemos realizar de forma inmediata o planificar una acción para realizarla pasado cierto tiempo (ir al médico, quedar con un amigo, hacer una gestión, etc.). La muestra de validación está compuesta por 164 personas mayores de 60 años sin deterioro cognitivo, procedentes tanto del medio rural como urbano. El análisis de la validez de constructo mediante técnicas de regresión múltiple y de análisis factorial confirmatorio, revelan que las tareas que forman el PECC se pueden clasificar en tres grupos en función de los procesos cognitivos implicados, a saber, procesos fluidos (planificación, flexibilidad cognitiva, razonamiento, memoria de trabajo), cristalizados (vocabulario y comprensión verbal) y de memoria episódica. Además, el PECC permite discriminar entre personas con deterioro cognitivo ligero y sin deterioro, así como entre personas mayores que viven en la comunidad y personas mayores que viven en un centro residencial. El PECC tiene una alta consistencia interna (Alfa de Cronbach = 0,82) así como una alta fiabilidad interjueces (0,99) y test-retest (0,75). El estudio original en el que se basa este artículo está publicado en la editorial EOS: Prueba para la evaluación de la cognición cotidiana (PECC). Autores: Julio Menor de Gaspar Pinilla y José Antonio Labra Pérez. Esta investigación ha sido financiada por la Beca Primitivo de Vega-2008 de investigación en el campo de la atención a las personas mayores concedida por la Fundación MAPFRE, y por el proyecto de investigación SEJ2007-61596 del Ministerio de Educación y Ciencia. | |||
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