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En relación con los últimos casos de violencia callejera acaecidos en Ceuta durante recientes fechas, el Colegio Oficial de la Psicología de Ceuta quiere posicionarse al lado de las víctimas y de sus familiares, de los que en definitiva están sufriendo las consecuencias psicológicas de estos acontecimientos traumáticos que, en mayor o menor medida, deja una huella psíquica difícil de borrar por el mero paso del tiempo. Al contrario, el tiempo juega contra las víctimas, pues tras el impacto inicial del hecho traumático, cuando aparentemente se regresa a la tranquilidad y seguridad de un hospital, del hogar o del abrigo familiar, se crea el caldo de cultivo por el cual el sujeto afectado podrá experimentar, más tarde o temprano, los síntomas del Trastorno por Estrés Postraumático, como así ha ocurrido en el último de los casos mencionados anteriormente, diez días después de que un desalmado disparara a bocajarro a Hicham mientras protegía de su acoso a unos adolescentes, y que ha requerido de la atención del Grupo de Intervención Psicológica en Catástrofes y Emergencias (GIPEC-Ceuta) en el mismo Hospital Universitario donde aún se halla convaleciente de sus heridas. |
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Por todo ello el COP Ceuta anima a víctimas, familiares e intervinientes a solicitar los servicios del GIPEC siempre que lo requieran, pues la intervención precoz de estas personas impactadas por hechos traumáticos mejora su estado psicológico, previene futuros trastornos más graves y reduce los costes sanitarios derivados de los tratamientos farmacológicos, no siempre convenientes.