El impacto psicológico en la infancia, de las bromas y burlas en los niños con disfluencias puede ser devastador y perdurar hasta la adultez. Consecuencia de ello pueden ser: baja autoestima, bajo rendimiento escolar, el rechazo social, la depresión y los sentimientos de impotencia y soledad. Para niños que tartamudean, estas consecuencias son aún más graves ya que se produce un círculo vicioso: a mayores burlas, mayor es su lucha con su habla, por lo tanto, tendrá más disfluencias, aumentando así la vergüenza y un deseo intenso de evitar y esconder el tartamudeo a toda costa. Así lo advierte la Fundación Española de la Tartamudez (entidad sin ánimo de lucro creada por personas y padres/madres de niños/as con disfemia con el fin de informar y sensibilizar sobre esta problemática a las familias, docentes, profesionales de la salud y al público en general), en una guía dirigida a docentes para ayudar a los niños y niñas con disfemia a sentirse cómodos y arropados dentro del ámbito escolar. El documento pone de relieve la importancia de hablar de niños con disfluencias o niños que tartamudean, no de niños tartamudos, evitando así catalogar o etiquetar a estos niños y niñas, con la carga psicológica que ello implica, más aún, teniendo en cuenta que el 5% de los niños tienen disfluencias entre los 2 y 5 años, y la posibilidad de remisión es del 80%. |
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Tal y como señala el documento, frente a un niño o una niña con disfluencias, es posible que un/a docente puede sentir ansiedad, incomodidad, irritación, angustia, deseos de sobreprotección, que le instigue a hablar, que termine la frase por él/ella, o que le inste a hablar mejor. Ante ello, sus autores consideran necesario el conocimiento y la comprensión de esta dificultad por parte del profesor o la profesora, de cara a dar una respuesta adecuada. Esta guía describe las características del/de la niño/a disfluente diferenciando entre edad preescolar o infantil (2 a 5 años) y edad escolar o primaria, con las manifestaciones propias del habla disfluente en cada edad, el diferente nivel de desarrollo lingüístico, cognitivo y emocional en ambos grupos y la distinta actitud frente a la disfluencia, con recomendaciones adaptadas a cada etapa. Se puede acceder a la guía directamente a través del siguiente enlace: |
“No se nos ocurre mejor inversión de futuro que mejorar el bienestar psicológico de nuestros jóvenes” – Proyecto PsiCE
Mejorar el bienestar psicológico de los y las jóvenes españoles resume uno de los objetivos principales del estudio PsiCE (Psicología en Contextos Educativos) una de las investigaciones más amplias realizadas en España sobre el estado del bienestar psicológico en adolescentes.