La práctica deportiva ha sido durante mucho tiempo reconocida por sus beneficios físicos, pero su capacidad para mejorar el bienestar psicológico cobra una especial relevancia cuando se trata de personas con trastorno mental grave (TMG). Así lo evidencia una reciente investigación publicada en la Revista de Psicología Aplicada al Deporte y al Ejercicio Físico, y dirigida por un equipo de psicólogos de la Universidad de Almería y la Universidad Internacional de La Rioja, con el objetivo de analizar el impacto de cuatro actividades deportivas —atletismo, fútbol-7, pickleball y senderismo— en el bienestar mental y físico de personas con TMG.
Salud mental y deporte: una necesidad prioritaria
Según el DSM-5, los TMG se caracterizan por alteraciones significativas del estado cognitivo, psicológico o comportamental, que reflejan disfunciones de procesos psicológicos, biológicos o del desarrollo. Dentro de esta categoría se incluyen patologías como la esquizofrenia, el trastorno bipolar, la depresión grave o el trastorno de inestabilidad emocional de la personalidad.
Las personas que conviven con este tipo de diagnósticos suelen enfrentar barreras añadidas como el aislamiento social, la baja autoestima, la ansiedad y una disminución significativa de su bienestar mental. A ello se suma el estigma que todavía rodea a los trastornos mentales, lo que dificulta su inclusión social y recuperación.
Conscientes de esta problemática, los autores del estudio han puesto en marcha una iniciativa pionera: analizar si una sola sesión de actividad física puede incidir de forma positiva en los estados de ánimo, la relajación y la percepción de bienestar físico de personas con TMG.

El programa Inclúyete: deporte y salud mental
El estudio se inscribe dentro del programa Inclúyete, una propuesta socioeducativa nacida en Almería en 2016, fruto de la colaboración entre la Universidad de Almería y la Fundación Pública Andaluza para la Integración Social de Personas con Enfermedad Mental (FAISEM). Su objetivo es claro: promover la autonomía, la inclusión social y el bienestar de personas con trastornos mentales graves a través de actividades físicas, culturales y artísticas, en las que participan conjuntamente usuarios/as de salud mental y estudiantes universitarios/as.
Las disciplinas seleccionadas para este estudio han sido el atletismo, el fútbol-7, el pickleball y el senderismo. Un total de 58 personas han participado en al menos una de las sesiones deportivas. El impacto de estas actividades ha sido evaluado mediante el cuestionario Inclúyete Actividad, que mide el bienestar psicológico (estado de ánimo y relajación antes y después de la sesión) y la percepción de utilidad en el bienestar físico.
Resultados: más allá del ejercicio físico
Los datos obtenidos revelan hallazgos significativos. En términos de bienestar psicológico, se observan mejoras en todos los grupos, siendo estadísticamente significativas en los de atletismo, pickleball y senderismo. El grupo de fútbol-7, aunque muestra una tendencia positiva, no alcanza diferencias significativas.
En cuanto al estado de ánimo, el mayor incremento se produce en el grupo de pickleball, seguido por el atletismo y el senderismo. Similar patrón se repite en los niveles de relajación. Estas mejoras no solo refuerzan el valor terapéutico del deporte, sino que evidencian su impacto inmediato en variables psicológicas y emocionales fundamentales para la recuperación psicológica.
En lo que respecta al bienestar físico, todos los grupos superaron el punto medio de percepción de utilidad, aunque sin diferencias significativas entre ellos. No obstante, las puntuaciones más altas corresponden, nuevamente, al pickleball y al atletismo.
Un enfoque integrador y sin diferencias de género
Un aspecto destacado de este trabajo es la inexistencia de diferencias estadísticamente significativas entre hombres y mujeres en las cinco variables analizadas (estado de ánimo, relajación y bienestar físico). Este dato es relevante, ya que apunta a la eficacia transversal de estas intervenciones independientemente del sexo de los participantes.
Además, el diseño de los talleres ha favorecido la interacción, la participación activa y la autonomía, factores clave para fomentar la autoestima y romper con estresores sociales vinculados al estigma que aún rodea a los problemas de salud mental.
El valor del pickleball y del contacto con la naturaleza
De entre todas las disciplinas analizadas, el pickleball —un deporte de raqueta de creciente popularidad— destaca por sus resultados positivos. Su carácter inclusivo, su bajo nivel de exigencia física inicial y su capacidad para promover la interacción social lo convierten en una herramienta terapéutica con gran potencial, especialmente para personas con ansiedad, estrés o dificultades en la autoestima.
El senderismo también ofrece beneficios notables. La conexión con la naturaleza, el ritmo pausado de la actividad y su componente grupal permiten a los y las participantes experimentar mejoras significativas en su estado psicológico y emocional, subrayando el papel de los entornos naturales como aliados del bienestar mental.
Limitaciones y futuras líneas de investigación
Pese a los resultados alentadores, los autores reconocen ciertas limitaciones. Se trata de un estudio cuasi-experimental sin grupo control y con un número de participantes reducido. Además, la medición se realiza tras una única sesión por modalidad, lo que impide evaluar efectos a medio o largo plazo.
En este sentido, se recomienda ampliar la muestra, analizar el impacto de programas prolongados y considerar variables adicionales como la calidad de la relación entrenador-participante o la frecuencia de la práctica deportiva.
Implicaciones prácticas para las políticas públicas
Los resultados de este estudio aportan evidencia relevante para el diseño y puesta en marcha de programas comunitarios en salud mental. En un contexto en el que las personas con trastorno mental grave enfrentan serias dificultades para acceder a recursos terapéuticos sostenibles y no farmacológicos, las actividades físico-deportivas evaluadas en esta investigación representan una herramienta de gran valor para la mejora del bienestar físico y psicológico.
Tal y como subrayan los autores, las iniciativas como el programa Inclúyete se configuran como una alternativa accesible, de bajo coste y alto impacto, capaz de incidir de forma positiva en aspectos clave como la motivación, la autoestima, la autonomía, el sentido de pertenencia y la creación de redes sociales de apoyo. Estos factores son esenciales no solo para la recuperación clínica, sino también para la inclusión social efectiva y duradera de personas con trastornos mentales graves.
Además, la ausencia de diferencias significativas por sexo en los beneficios obtenidos refuerza la universalidad de este tipo de intervenciones, que pueden implementarse en poblaciones diversas sin necesidad de grandes adaptaciones. Esto convierte al modelo analizado en una opción escalable y adaptable a distintos contextos geográficos y socioculturales, con potencial para integrarse en las estrategias de salud pública orientadas a la promoción del bienestar mental y la reducción del estigma.
En consecuencia, este trabajo no solo ofrece datos alentadores desde una perspectiva clínica y psicológica, sino que plantea una llamada a la acción para los responsables políticos: invertir en programas inclusivos de actividad física no solo es viable y eficaz, sino que contribuye de manera decisiva a la mejora de la salud mental comunitaria y al cumplimiento de los derechos sociales de una población históricamente marginada.
Conclusión: una estrategia prometedora para la recuperación
Este estudio subraya la utilidad de las actividades físico-deportivas como alternativa no farmacológica para mejorar el bienestar mental y físico en personas con TMG. Más allá del rendimiento deportivo, lo esencial es el efecto positivo que estas prácticas generan en la salud psicológica de los y las participantes.
Combatir el estigma, fomentar la inclusión y crear redes de apoyo son objetivos prioritarios en salud mental. Y el deporte, tal y como demuestra este trabajo, puede ser una vía efectiva, accesible y transformadora para alcanzarlos.
Se puede acceder al documento completo desde la página web de la Revista de Psicología Aplicada al Deporte y al Ejercicio Físico, o bien directamente aquí:
Peña-Muñante, G., Cerezuela, J., Lirola, M. y Cangas, A. J. (2025). Actividades deportivas y bienestar en personas con trastorno mental grave. Revista de Psicología Aplicada al Deporte y el Ejercicio Físico, 10(1), Artículo e2. https://doi.org/10.5093/rpadef2025a2