Próximamente, entre los días 8 y 10 de noviembre, tendrá lugar la celebración de las primeras Jornadas Nacionales de Psicología y Envejecimiento, organizadas con motivo del Año europeo del envejecimiento activo y de la solidaridad intergeneracional.
Este encuentro, contará con la participación de importantes expertos en el ámbito de la Psicogerontología de toda la geografía española, y permitirá conocer los avances que se están realizando desde las diferentes áreas de intervención, compartiendo buenas prácticas y experiencias. Dada la importancia de este evento, Infocop ha querido entrevistar a Manuel Nevado Rey, director de la Fundación María Wolff, y que participará como ponente en las Jornadas. |
ENTREVISTA
Los próximos días 8, 9 y 10 de noviembre, tendrán lugar las primeras Jornadas Nacionales de Psicología y Envejecimiento, ¿podría explicarnos qué opina de la importancia que se está dando en España al fomento de las relaciones intergeneracionales? ¿Qué programas se están llevando a cabo para fomentar la solidaridad intergeneracional y cuáles son sus objetivos?
Las relaciones intergeneracionales me parecen una experiencia muy interesante. Enfocando las relaciones solamente a colectivos con unas mismas características (mayores, menores, adolescentes, etc.), se consiguen crear pequeños guetos sociales donde se crean unos prismas de realidad distorsionados, propiciando la aparición de estereotipos.
Con la puesta en marcha de programas intergeneracionales, se pretende todo lo contrario: la interacción, el aprendizaje mutuo, el intercambio de conocimientos y experiencias, y la visión de las diferencias, como aspectos claves para una convivencia intergeneracional.
Como programas intergeneracionales que se están desarrollando últimamente, me parece muy interesante el que está desarrollando el compañero Juan Cruz (psicólogo) en La Casa Encendida de Madrid, con el ocio inclusivo; también me parece una experiencia interesante la desarrollada por Luis Picazo (COPMadrid) con su programa de mentoring, donde psicólogos con amplia experiencia en determinados sectores de la profesión, ayudan a jóvenes psicólogos en el desarrollo de la misma.
Como experto en el tema, ¿cuáles son las áreas de intervención de la psicología del envejecimiento? ¿Qué papel juegan los psicólogos en este ámbito?
Sigo creyendo que se trata de una de las áreas con más proyección dentro de la psicología, pero quizás, deberíamos salirnos de las salidas laborales clásicas, como el trabajo en residencias. Los mayores, cada vez van a necesitar más ayuda del psicólogo, la edad de jubilación se está atrasando, cada vez hay más problemas de pareja a partir de los 60 años, la sexualidad en los mayores sigue siendo un área tabú, y, con la crisis, hemos pasado de un nido vacío a un nido lleno. Las residencias han tocado su techo y los programas de intervención comunitaria en los domicilios abren una nueva vía a los psicólogos para poder trabajar en esta área.
Según su opinión, ¿en qué situación se encuentra la psicología del envejecimiento y a qué retos futuros se enfrenta?
Nos enfrentamos a un reto que es el de abrirnos paso y mantenernos dentro del campo de los mayores; tenemos que hacernos imprescindibles y fuertes como profesión, luchar contra el intrusismo, y defendernos como colectivo ante la inclusión de otras especialidades que «juegan a ser psicólogos» y que nos limitan nuestro ámbito laboral.
Usted participa en las Jornadas, ¿podría señalarnos algunos de los temas que va a tratar durante su celebración?
Trataré el modo de vida en una residencia de mayores, el tema del buen trato al mayor y las relaciones intergeneracionales a través del grupo desarrollado en Madrid de psicólogos jubilados.
¿Cuáles son sus expectativas respecto a la celebración de este encuentro?
Es la primera vez que se celebran jornadas sobre envejecimiento y psicología, esto supone un reto. Espero poder aportar mi granito de arena y aprender de otros compañeros para, entre todos, seguir creciendo en este campo.