El 35,6% de la población española presenta algún problema de salud mental, siendo los más frecuentes en las consultas de atención primaria (AP) del Sistema Nacional de Salud, los trastornos de ansiedad, seguidos de los problemas de sueño y la depresión, que mantienen la tendencia creciente registradas en los últimos años. Sin embargo, según los datos, tan solo hay 548 psicólogos trabajando en este primer nivel asistencial de la salud.
Estos son algunos de los datos recogidos en el nuevo Informe Anual del Sistema Nacional de Salud 2024, que ofrece un análisis completo de la salud mental en España e identifica su evolución epidemiológica junto con los factores sociales, demográficos y asistenciales que determinan su impacto.
Concretamente, el informe incluye datos relativos al bienestar y a la salud mental de la población española, cifrada actualmente en 48.619.695 habitantes (el 51,0% mayor de 45 años y una de cada cinco personas de 65 o más años) -lo que sitúa a España entre los 4 países europeos con mayor población-, aportando conclusiones tan importantes como las que recogemos a continuación:

La prevalencia de los problemas de salud mental y del comportamiento: una tendencia creciente que afecta a todas las edades.
En 2023, se han registrado 355,9 casos diagnosticados de trastornos mentales y del comportamiento por cada 1.000 habitantes (387,0 mujeres vs. 323,4 hombres).
El análisis por grupos de edad revela que la prevalencia aumenta de manera progresiva a lo largo de la vida. En la primera infancia, entre los 0 y los 4 años, se registran 100,2 casos por 1.000 habitantes, pero esta cifra se eleva de forma constante hasta alcanzar 574,4 por 1.000 en el grupo de 90 a 94 años. Esta distribución sugiere que los problemas de salud mental no solo afectan de forma notable a la población adulta joven, sino que se intensifican en la vejez, donde los problemas del comportamiento y del estado de ánimo se suman frecuentemente a otros procesos físicos y sociales asociados al envejecimiento.
El documento destaca que la prevalencia ajustada por edad es de 342,9 casos por cada 1.000 habitantes, siendo un 8,5% más alta respecto a 2019, un incremento que confirma una tendencia ascendente en la demanda de atención en salud mental. También señala que los varones presentan mayor prevalencia durante la infancia y la adolescencia, mientras que las mujeres concentran la mayor carga de enfermedad a partir de la juventud y durante toda la edad adulta.
Más del 40% de las personas mayores de 50 años presenta algún diagnóstico de salud mental, y dicha proporción supera el 50% en las personas de 80 años o más. Este dato adquiere especial relevancia en un país que experimenta un rápido proceso de envejecimiento demográfico, pues tiene implicaciones directas en la planificación de recursos asistenciales y en la necesidad de adaptar los servicios sanitarios a la realidad de una población cada vez más longeva.
Ansiedad, trastornos del sueño y depresión: diagnósticos de salud mental más frecuentes en España.
Los problemas de salud mental más frecuentemente registrados en las historias clínicas de atención primaria y con una tendencia ascendente en la serie 2016-2023, son:
Los trastornos de ansiedad continúan siendo los problemas de salud mental con mayor prevalencia, con 111,3 casos por 1.000 habitantes. Entre las mujeres, la cifra se eleva hasta 143,3 casos por 1.000, mientras que en los hombres se sitúa en 77,9 por 1.000. En determinadas franjas de edad, especialmente entre los 40 y los 79 años, alrededor del 17% de las mujeres presenta un diagnóstico relacionado con la ansiedad. Aunque continúa siendo el trastorno más prevalente, la cifra es 12,6% inferior a la del año 2021, cuando se alcanzó el máximo de la serie temporal.
Los trastornos del sueño, con 87,3 casos por 1.000 habitantes, se posicionan como el segundo problema más frecuente. Su evolución ascendente en el periodo 2016-2023 muestra que constituyen un ámbito creciente de demanda sanitaria.
Les siguen los trastornos depresivos, con 49,3 casos por 1.000 habitantes, también con una tendencia creciente.
La salud mental en la infancia y la adolescencia: aumento de la ansiedad, los problemas de sueño y de aprendizaje.
La evolución de los problemas de salud mental en la población menor de 25 años es uno de los aspectos más relevantes del informe. Los datos muestran aumentos significativos desde 2019 en múltiples ámbitos. Los trastornos de ansiedad son los problemas de salud mental más registrados en la infancia y la adolescencia, alcanzando los 34,6 casos por 1.000 habitantes, con un incremento del 36,4%. Les siguen las dificultades específicas del aprendizaje, con 31,9 casos por 1.000, tras aumentar un 39,4% en el periodo analizado. Los trastornos del sueño, que registran 27,2 casos por 1.000, han crecido un 36,3% desde 2019, superando a los problemas hipercinéticos, que se sitúan en 27,0 casos por 1.000 habitantes.
Estos datos reafirman la importancia de seguir evaluando la salud mental de niños, niñas y adolescentes, pues constituyen un grupo especialmente vulnerable en el que convergen factores educativos, psicológicos, emocionales, sociales y familiares.
Enfermedades cardiovasculares y cáncer, principales causas de mortalidad.
En 2023 se registran 436.124 defunciones (220.742 hombres y 215.382 mujeres), con una tasa bruta de mortalidad de 902,6 fallecimientos por 100.000 habitantes (932,1 en hombres y 874,2 en mujeres). Las principales causas de mortalidad siguen siendo las enfermedades cardiovasculares y el cáncer que provocan más del 50% de las defunciones, seguidas de las enfermedades respiratorias (10,8%).
El suicidio en España: un problema de salud pública.
El documento incluye un análisis detallado de la mortalidad por suicidio. A este respecto, indica que, en 2023, se produjeron 4.116 fallecimientos por suicidio, 3.044 hombres y 1.072 mujeres. La tasa bruta de mortalidad se sitúa en 8,5 muertes por cada 100.000 habitantes s (12,9 en hombres y 4,4 en mujeres), mientras que la tasa ajustada por edad es de 8,0 por 100.000 (12,5 en hombres y 4,1 en mujeres).
Después de varios años de incremento, en 2023 se detecta un descenso del 3,6% respecto al año anterior. La tasa de mortalidad por suicidio es mayor en hombres que en mujeres en todos los grupos de edad, registrándose la tasa más elevada en hombres de 85 y más años, con 39,4 fallecimientos por 100.000 habitantes (en las mujeres de ese mismo grupo de edad ha sido de 5,2 fallecimientos por 100.000 habitantes).
Estas cifras evidencian que el suicidio es un fenómeno con un marcado componente de género y especialmente significativo en edades avanzadas.
Determinantes sociales de la salud.
- Obesidad y sobrepeso
La obesidad en España afecta al 15,2% de la población de 18 y más años (hombres: 15,2%; mujeres: 15,1%) y el 39,8% padece sobrepeso (hombres: 47,0%; mujeres: 32,9%). Aunque la obesidad en adultos muestra una tendencia descendente desde 2017, el sobrepeso presenta una tendencia ascendente con lo que, globalmente, el exceso de peso continúa aumentando de forma progresiva.
- Actividad física
El 30,5% de la población adulta (de 15 y más años) se declara sedentaria en su tiempo libre, siendo las mujeres más sedentarias (34,2%) que los hombres (26,6%). El sedentarismo está más extendido en las personas con nivel educativo inferior, 42,2% frente al 17,5% en las personas con nivel superior. El 47,3% de la población europea no dedica tiempo a diario a la actividad física aeróbica beneficiosa para la salud, situándose España un punto porcentual por encima de la media europea
- Consumo de alcohol y tabaco
El informe integra también información sobre los hábitos de consumo de sustancias psicoactivas, en particular tabaco y alcohol, que forman parte de los determinantes sociales de la salud. Las cifras indican que el 16,6% de la población adulta fuma a diario, con mayor prevalencia en hombres (20,2%) que en mujeres (13,3%). Entre las personas de 15 a 24 años, el consumo diario es del 10,7%, y la media de edad de inicio se sitúa en 16,4 años.
En cuanto al alcohol, desciende el consumo habitual en adultos. El consumo de riesgo aparece en el 1,3% de la población adulta, cifra que asciende al 1,6% en hombres y se sitúa en 1,1% en mujeres. La prevalencia de consumo intensivo episódico de alcohol en la población de entre 15 y 24 años en el último mes es del 10,3%, con pequeña diferencia entre hombres (10,0%) y mujeres (10,6%).
Hay 548 profesionales de la psicología en atención primaria.
El informe recoge datos oficiales sobre los y las profesionales que integran el SNS, cifrándose en 786.747 profesionales (de los cuales, 176.918 son médicos, 227.098 enfermeras y 382.731 otros profesionales sanitarios y no sanitarios), lo que supone una tasa de 16,3 por cada 1.000 habitantes. De estos, el 75,7% trabajan en los hospitales, el 16,1% lo hace en los centros de atención primaria, y el 3,2% en los servicios de urgencias y emergencias 112/061. El 51,4% de todos los efectivos son personal médico y de enfermería.
Como ya señalábamos anteriormente, de los otros 382.731 profesionales -tanto sanitarios como no sanitarios-, el 84,8% trabajan en los hospitales, el 10,1% en atención primaria y el 4,5% en los Servicios de Urgencias y Emergencias 112/061, además del 0,7% que están realizando la Formación Sanitaria Especializada. En este grupo se incluyen los y las profesionales de la psicología, aunque el informe tan solo recoge los que trabajan en el primer nivel asistencial de la salud, cifrándolos en 548, lo que supone el 0,14% de dicho grupo. Si bien la cifra ha aumentado en comparación con la del año pasado (419 psicólogos/as), sigue siendo, a todas luces, insuficiente para dar respuesta a la alta demanda en salud mental. En posteriores informes, sería deseable contar con datos desagregados sobre los y las profesionales de la psicología que desempeñan su labor en el resto de niveles asistenciales.
El uso de ansiolíticos y antidepresivos continúa siendo elevado en España.
Del total de recetas médicas oficiales facturadas en 2024, los medicamentos representan el 97,5% de los envases y el 94,4% del importe a PVP. El subgrupo de mayor consumo sigue siendo el de analgésicos (143,5 millones de envases; 12,3%), seguido de los agentes del sistema renina-angiotensina (8%). En el ámbito de la salud mental, los psicolépticos (ansiolíticos, antipsicóticos, hipnóticos y sedantes) alcanzan 91,5 millones de envases (7,8%) y los psicoanalépticos —que incluyen antidepresivos— suman 63,9 millones (5,5%). Además, principios activos como lorazepam, sertralina, alprazolam o lormetazepam, figuran entre los más dispensados, consolidando el peso destacado de los psicofármacos dentro del consumo farmacéutico del SNS.
Accesibilidad percibida en la atención en salud mental.
El informe también aporta información sobre la accesibilidad percibida en diferentes servicios, incluyendo los de salud mental. A este respecto, el Ministerio de Sanidad indica que el 2,8% de la población declara no haber podido permitirse la asistencia a la salud mental en los últimos doce meses por motivos económicos, una inaccesibilidad que afecta más a las mujeres que a los hombres en prácticamente todos los grupos de edad. La mayor dificultad se concentra entre los 25 y los 34 años, donde el porcentaje alcanza el 5,9%, llegando hasta el 7,5% en mujeres de esa franja.
No obstante, cabe señalar que España se sitúa como el segundo país de la Unión Europea con menor inaccesibilidad declarada por motivos económicos -más aún, considerando que cuenta con sanidad pública-, con una diferencia de 2,5 puntos respecto a la media europea. Estos datos ponen de manifiesto que, aunque la accesibilidad económica es relativamente favorable en comparación con otros países de la UE, persisten desigualdades significativas entre sexos y edades, especialmente entre mujeres jóvenes y adultas.
Se puede acceder al informe completo desde la página web del Ministerio de Sanidad o bien directamente aquí.
