Jerónima Vázquez-Ortiz1,2, Marta Álvarez-Serrano1, María Reyes-Alcaide1, Mª Jesús Vázquez-Ramos1, Marta Nadal-Delgado1, Rosario Martínez-Domingo1 y Juan Antonio Cruzado3
1 Asociación Oncológica Extremeña (AOEx)
Los profesionales de la salud son uno de los colectivos más vulnerables al estrés crónico laboral y al desgaste emocional, debido a que su trabajo les pone en interacción directa con los problemas del paciente en todas sus dimensiones: psicológica, física y/o social.
El burnout se considera consecuencia de un proceso crónico de estrés laboral, en el que las estrategias de afrontamiento que utiliza el profesional dejan de ser eficaces ante la perpetuación de la situación estresante en el tiempo. La respuesta ante este proceso de estrés crónico es afectiva (agotamiento emocional), cognitiva (pérdida de ilusión en el trabajo) y actitudinal (despersonalización) y sus consecuencias se dejan sentir tanto a nivel individual como organizacional, con la consecuente disminución de la calidad asistencial.
Datos recientes indican que entre la tercera y la cuarta parte de los sanitarios que forman parte de los equipos hospitalarios presentan alguno de los tres indicadores de burnout; en el caso del personal de enfermería, el cansancio emocional puede estar presente casi en la mitad de los trabajadores. En lo que respecta a la enfermería oncológica, hay resultados empíricos que muestran una mayor incidencia de estrés laboral y desgaste profesional en esta especialidad en comparación con otras, particularmente en lo relativo al agotamiento emocional y a la baja realización personal. |
Sabemos que una de las repercusiones más habituales del burnout en este colectivo es la intención de abandono del trabajo, con la consecuente pérdida de potencial humano experto en el área.
Como grupo de psicooncólogos que trabajamos a diario con la enfermería oncológica, somos conscientes y sensibles ante estas situaciones, ya que forma parte de nuestra labor el atender y dar respuesta a los problemas de desgaste profesional de las personas con quienes compartimos equipo. De este modo, a menudo son los propios profesionales quienes nos demandan la intervención psicológica ante el estrés.
Este es justamente el punto de partida de este estudio: un equipo de enfermería oncológica con signos importantes de desgaste profesional, principalmente en lo referido a la baja realización personal, que demanda una intervención ante su psicooncológa.
La intervención terapéutica llevada a cabo se basa en la aplicación de un paquete de tratamiento multicomponente, sobre la base de técnicas cognitivo-conductuales para la inoculación del estrés e implementada de forma continua e intensiva, en un novedoso contexto de convivencia grupal realizado en un entorno natural, en el que la convivencia se guió y cuidó para estimular la cohesión grupal, y donde fue posible llevar a cabo objetivos como la toma de conciencia de las dificultades emocionales, el desarrollo de estrategias de afrontamiento, el control de la sobreactivacion y la mejora de la cohesión grupal de los participantes.
Lo novedoso de este trabajo es que el contexto del tratamiento psicológico fuera distinto al del trabajo, ajeno a donde habitualmente se relacionan y dando a los participantes la oportunidad de interaccionar durante un período de tiempo suficiente (varios días), de manera que les permitiera conocerse «sin bata», profundizar en la relación mutua y mejorar la cohesión grupal.
Además, el contexto medioambiental natural que enmarca todo el proceso de la intervención (entorno rural de montaña), por su gran atractivo y por su potencial relajante y «desestresante», pudo resultar ser de especial interés de cara a la motivación e implicación de los participantes, permitiéndonos también incorporar elementos de interacción directa con el medio físico (como paseos al aire libre o práctica de ejercicios para el control de la sobreactivación psicofisiológica junto a cascadas naturales) como parte de los recursos terapéuticos, lo que creemos que pudo incrementar la efectividad de nuestra intervención psicológica. |
Para valorar los efectos de la experiencia terapéutica realizamos medidas pre y post-tratamiento de ansiedad, depresión y de los factores emocionales que definen el burnout o desgaste profesional (cansancio emocional, despersonalización y falta de realización personal) y utilizamos un diseño cuasi-experimental de dos grupos: uno experimental (grupo de tratamiento) y otro control (que no presentaba signos importantes de desgaste profesional y que no recibió tratamiento).
Al mes de la experiencia, en el grupo tratado mejoraron los niveles de ansiedad, cansancio emocional y realización personal, equiparándose los valores de las variables dependientes a los del grupo control. A ello contribuyó el intenso trabajo tanto en psicoeducación como el entrenamiento en técnicas para el control de la sobreactivación, para la gestión emocional o de conflictos interpersonales, así como la profundización en actitudes y herramientas básicas de counselling. Todo ello llevado a la práctica a través de ejercicios prácticos, dinámicas grupales, análisis de casos, role-playing, etc.
Con respecto a los efectos a largo plazo de la intervención, tras un año, sigue habiendo un efecto positivo importante sobre la realización personal y la despersonalización, aunque los efectos sobre el cansancio emocional y la ansiedad se fueron debilitando con el paso del tiempo y la vuelta a la rutina del trabajo. Esto nos puede estar indicando la necesidad de realizar intervenciones terapéuticas sistematizadas en el tiempo (talleres con periodicidad anual) que contribuyan al reforzamiento de las herramientas y habilidades trabajadas con anterioridad o a la adquisición de otras nuevas.
Por último, destacar la importante labor que realiza el/la psicooncólogo/a, como parte integral esencial en los equipos sanitarios de oncología, en lo referente al abordaje preventivo o terapéutico del estrés laboral y del desgaste profesional de sus miembros, fomentando con ello la salud psicológica de los profesionales, la cohesión y rendimiento del equipo, así como la mejora de la calidad asistencial que se proporciona al paciente y su familia.
El artículo completo se puede encontrar en la revista Psicooncología:
Vázquez-Ortiz J., Vázquez-Ramos M.A., Álvarez-Serrano M., Reyes-Alcaide M., Martínez-Domingo R., Nadal-Delgado M. y Cruzado J.A. (2012). Intervención psicoterapéutica grupal intensiva realizada en un entorno natural para el tratamiento del burnout en un equipo de enfermería oncológica. Psicooncología, 9 (1), 161-182
Sobre los autores:
Jerónima Vázquez Ortiz. Es Doctora en psicología por la Universidad de Sevilla y Máster en Psicooncología por la Universidad Complutense de Madrid. Trabaja como profesora titular en el Centro Universitario Santa Ana (Universidad de Extremadura) y como psicooncóloga para la Asociación Oncológica Extremeña (AOEx) en la Unidad de Onco-Hematología del Complejo Hospitalario Llerena-Zafra de Badajoz. Sus líneas de investigación se centran en la Psicología de la salud y la Psicooncología. Marta Álvarez Serrano. Es Máster en Psicooncología por la UCM y Máster en Terapia de Conducta y Salud por la UNED. Trabaja para AOEx ejerciendo su labor como psicooncóloga en la Unidad de Onco-Hematología y Radioterapia del Hospital Virgen del Puerto de Plasencia. Sus líneas de investigación se centran en la Psicooncología. María Reyes Alcaide. Es Máster en Psicooncología por la UCM y Máster en Cuidados Paliativos por la Universidad de Valladolid. Trabaja como psicooncóloga para AOEx en el Servicio de Oncología y el Equipo de Cuidados Paliativos del Hospital Campo Arañuelo de Navalmoral de la Mata (Cáceres). Imparte formación en la Universidad Camilo José Cela (Madrid), en La Escuela de Estudios y Ciencias de la Salud de Extremadura y en el COP-Extremadura. Sus líneas de investigación están centradas en Psicooncología y en Cuidados Paliativos. María Jesús Vázquez Ramos. Es Máster en Psicooncología por la Universidad Complutense de Madrid. Trabaja para AOEx como psicooncóloga en la Unidad de Oncología Pediátrica del Materno Infantil de Badajoz. Por otra parte, trabaja con niños diagnosticados de TDAH en la Clínica de Neuropediatría Vaquerizo-Madrid. Su trabajo en investigación está dirigido hacia la Psicooncología. Marta Nadal Delgado. Es Licenciada en Psicología por la Universidad Pontificia de Comillas, Máster en Psicooncología, en Tabaquismo y en Cuidados Paliativos. Trabaja como psicooncóloga para la AOEx ejerciendo su labor en el Hospital Infanta Cristina de Badajoz desde hace diez años. Imparte formación en la Escuela de Enfermería del Servicio Extremeño de Salud. Su interés investigador se dirige hacia el campo de la Psicooncología. Rosario Martínez Domingo. Es Licenciada en Psicología por Universidad Autónoma de Madrid, Máster en Psicooncología por Universidad Complutense de Madrid, y tiene formación en abordaje del Dolor Crónico. Trabaja para AOEx ejerciendo su labor como psicooncóloga en la Unidad de Onco-Hematología del Hospital San Pedro de Alcántara de Cáceres. Sus líneas de investigación se centran en la Psicooncología y en Consejo Genético Oncológico. Juan A. Cruzado. Es Doctor en Psicología por la UCM (premio extraordinario). Psicólogo Clínico Especialista. Director del Magister en Psicooncología de la UCM. Director de la revista Psicooncología. Ha obtenido el Premio de Investigación Rafael Burgaleta del COP en los años 2010 y 2011, y el Premio Mar Mari. Es autor del libro «Tratamiento psicológico en pacientes con cáncer» además de otras numerosas publicaciones en el ámbito de la Psicooncología. |