Los/as psicólogos/as utilizan frecuentemente juegos para conectar con niños/as, diagnosticarlos y tratarlos, pero hay algunos tipos de juego que también están demostrando su eficacia como intervención terapéutica para adolescentes y personas adultas. Al combinar aspectos de intervenciones basadas en la evidencia, como el juego de roles, el psicodrama y la psicoterapia de grupo, cada vez más profesionales de la Psicología utilizan juegos de rol de mesa como modalidad de tratamiento, dirigida a todas las edades. Hasta el momento, la investigación en este campo es limitada, pero los/as psicólogos/as que utilizan esta intervención creen que es prometedora para mejorar los síntomas de muchos trastornos clínicos.
Con esta introducción, la Asociación Americana de Psicología (APA, American Psychological Association), presenta un artículo publicado en su revista APA Monitor on Psychology, a través del cual aborda los posibles beneficios del uso de juegos de rol de mesa como terapia de grupo para el abordaje de diversos problemas de salud mental.
Tal y como señala en su texto, en los últimos años, los juegos de rol de mesa, como, por ejemplo, Dragones y Mazmorras (Dungeons & Dragons), han emergido como una herramienta innovadora en el ámbito de la Psicología Clínica. Estos juegos, tradicionalmente asociados al entretenimiento, están siendo utilizados por profesionales de la Psicología como una forma de terapia grupal para abordar una variedad de trastornos mentales, incluyendo la ansiedad, la depresión, el trastorno por déficit de atención e hiperactividad (TDAH) y el trauma, entre otros.

La mecánica terapéutica de los juegos de rol
Los juegos de rol de mesa (TTRPGs, por sus siglas en inglés, Tabletop role-playing games) implican que los y las participantes asumen personajes en una narrativa guiada por un «maestro del juego» (GM, game master), quien, en contextos terapéuticos es un/a profesional de la Psicología capacitado/a. Este entorno permite a los/as pacientes explorar diferentes aspectos de sí mismos/as y practicar habilidades sociales en un espacio seguro y controlado.
La estructura de estos juegos fomenta la cooperación, la comunicación y la resolución de conflictos, habilidades esenciales para la vida diaria. Además, permite a los terapeutas observar y abordar en tiempo real los síntomas y comportamientos de todos y todas los/as participantes, facilitando intervenciones más eficaces y efectivas.
Aplicaciones en trastornos específicos
– Ansiedad
Los juegos de rol de mesa (TTRPG) brindan a las personas con trastornos de ansiedad la posibilidad de enfrentar situaciones desafiantes a través de sus personajes, lo que puede ayudar a reducir los pensamientos ansiosos y mejorar las habilidades de afrontamiento.
Al desempeñar el papel de un héroe o de un personaje resiliente, los pacientes pueden ganar confianza, practicar la exposición a situaciones sociales y desarrollar una mayor tolerancia a la incertidumbre, todo dentro de un marco seguro. Esto les permite experimentar una sensación de autonomía que contrarresta los patrones de evitación típicos de los trastornos ansiosos.
– Depresión
Los TTRPG ofrecen una estructura narrativa que fomenta la motivación, la conexión interpersonal y la sensación de logro. Los/as pacientes con depresión, que a menudo experimentan anhedonia y retraimiento social, pueden beneficiarse del trabajo en equipo, la superación de retos compartidos y el reconocimiento de sus contribuciones dentro del grupo, pudiendo experimentar una mejora de su estado de ánimo. Además, la progresión del personaje y el feedback positivo de los demás jugadores pueden reforzar la autoestima y el sentido de propósito.
– Trastorno por déficit de atención con hiperactividad (TDAH)
Los juegos de rol requieren atención sostenida, planificación y toma de decisiones, lo que puede resultar muy beneficioso para niños/as y personas adultas con TDAH. El formato estructurado de los TTRPG ayuda a mejorar el control de impulsos, la concentración, las habilidades de organización y la memoria de trabajo. A través del juego, los/as participantes aprenden a esperar su turno, a respetar reglas y a anticipar consecuencias, desarrollando así herramientas clave para el funcionamiento ejecutivo.
– Trastorno obsesivo-compulsivo (TOC)
En contextos terapéuticos cuidadosamente guiados, los TTRPG pueden ayudar a personas con TOC a flexibilizar patrones rígidos de pensamiento y conducta. Por ejemplo, al asumir roles distintos y enfrentar situaciones imprevistas durante el juego, se trabaja la tolerancia a la incertidumbre y la capacidad de tomar decisiones sin compulsiones. El/la terapeuta puede guiar el proceso para que estos/as pacientes identifiquen sus rituales y se atrevan a actuar sin ellos dentro del marco del juego.
– Trastorno por estrés postraumático (TEPT)
Los juegos de rol pueden facilitar la exposición segura a narrativas que evocan temas relacionados con el trauma, sin revivir directamente las experiencias traumáticas reales. A través de personajes ficticios, los pacientes pueden explorar la resiliencia, el sentido de justicia o la reparación simbólica. Además, trabajar en grupo ofrece oportunidades para reconstruir la confianza y fomentar la conexión social, algo que, según señala la APA, puede contrarrestar el aislamiento frecuente en quienes han vivido traumas.
– Trastorno del espectro del autismo (TEA)
Personas con TEA, especialmente, niños, niñas y adolescentes, pueden beneficiarse enormemente de la estructura predecible y las reglas claras de los TTRPG. Estos juegos constituyen un entorno ideal para practicar habilidades sociales, como la escucha activa, el turno de palabra, la empatía y la interpretación de intenciones. Además, permiten desarrollar el juego imaginativo y la comprensión de normas sociales de una manera lúdica, lo que puede ser más accesible que en entornos no estructurados.
Desarrollar habilidades para la vida diaria
Más allá de los diagnósticos clínicos, los TTRPG pueden ser utilizados como una herramienta para el desarrollo general de habilidades esenciales para la vida. Esto incluye el trabajo en equipo, la gestión del tiempo, la solución de problemas, la planificación, el establecimiento de objetivos, la regulación emocional y la toma de decisiones éticas. Son útiles tanto en el contexto clínico como educativo y especialmente eficaces en contextos con jóvenes y poblaciones vulnerables.
Creación de personajes como herramienta terapéutica
De acuerdo con la APA, la creación de personajes en los juegos de rol de mesa permite a los/as pacientes explorar diferentes aspectos de su identidad y experimentar nuevas formas de interacción social. Por ejemplo, una persona puede crear un personaje que represente una versión más joven de sí misma para abordar experiencias adversas de la infancia. Esta técnica puede facilitar la introspección y el procesamiento de traumas pasados.
Establecimiento de límites y seguridad emocional
En el contexto terapéutico, la Asociación recuerda la importancia de establecer límites claros para garantizar la seguridad emocional de los/as participantes. Los/as psicólogos/as trabajan con los jugadores para identificar temas o situaciones que desean evitar en el juego, como ciertas fobias o experiencias traumáticas. Además, se utilizan señales no verbales, como fichas de póker, para que los/as jugadores puedan indicar si se sienten incómodos/as durante el juego, promoviendo así un entorno de respeto y comprensión.
Accesibilidad y compromiso
Los TTRPG pueden hacer que la terapia sea más accesible y atractiva, sobre todo, para aquellos/as que pueden sentirse intimidados/as por la terapia tradicional. La naturaleza lúdica de los juegos puede aumentar la motivación y el compromiso de los pacientes, lo que, a su vez, puede mejorar los resultados terapéuticos.
Implementación en entornos virtuales
Con el auge de la teleterapia, los juegos de rol de mesa también se están adaptando a entornos virtuales. Por ejemplo, algunos/as terapeutas dirigen sesiones de juego a través de plataformas como Zoom o Google Meet, lo que permite ampliar el acceso a personas que viven en zonas rurales, tienen movilidad reducida o simplemente se sienten más cómodas en casa.
La flexibilidad de los TTRPG los convierte en una opción viable tanto en intervenciones individuales como grupales, en modalidades presenciales o en línea, y adaptados a distintas edades y niveles de funcionamiento cognitivo.
Investigación y perspectivas futuras
Aunque la investigación sobre el uso de TTRPG en terapia aún es limitada, los estudios preliminares y las observaciones clínicas sugieren que esta metodología tiene un gran potencial para abordar diversos trastornos mentales. La APA recuerda que se necesitan más estudios para comprender completamente su eficacia y para desarrollar protocolos estandarizados que puedan ser implementados en diferentes contextos clínicos.
Fuente: Abramson, A. (2025). Improving treatment with role-playing games. APA Monitor on Psychology, vol. 56, 3. American Psychological Association.