PRESENTADO EL PRIMER ESTUDIO SOBRE FORMACIÓN VIAL Y SU INCIDENCIA EN LA SEGURIDAD

15 Sep 2009

COP Madrid

El COPM y la Fundación José Pons firmaron un convenio marco de colaboración para desarrollar diferentes acciones:

  • Estudios y programas de investigación que permitan un mayor y mejor conocimiento de la situación en materia de Seguridad Vial tanto en el ámbito nacional como internacional.
  • Desarrollo y ejecución de proyectos y programas en el ámbito de la Seguridad Vial, especialmente aquellos que tengan por objeto promover medidas y desarrollar acciones para concienciar a la sociedad de que entre todos podemos reducir las cifras de accidentes en nuestras carreteras.
  • Creación, desarrollo y ejecución de acciones formativas y campañas de sensibilización en Educación y Seguridad Vial en los diferentes segmentos de la sociedad.
  • Colaboración en aquellos proyectos que en pro de la Seguridad Vial se pongan en marcha con los diferentes organismos públicos, agentes sociales, empresas privadas, para que la prevención en Seguridad Vial sea una realidad.

Fruto de este convenio, se presentó recientemente un primer estudio, titulado Formación Vial y su incidencia en la seguridad. Este estudio ha sido realizado por la Fundación José Pons, el Comisariado Europeo del Automóvil, Pons Editorial y el COPM, y de él se desprende que los accidentes de tráfico son para los conductores la causa de muerte más importante, seguida del cáncer, los atentados terroristas, la violencia de género, las enfermedades cardiovasculares y el consumo de drogas.

El estudio se ha realizado a nivel nacional sobre una muestra de 1.350 conductores, que se han mostrado especialmente preocupados por las muertes producidas por los accidentes de tráfico y que introducen como novedad la necesidad de una mejora de la formación como elemento clave para la reducción de la siniestralidad. Además, los encuestados también consideran que reducir dichos accidentes pasa por mejorar el estado de las vías en cuanto a señalización y firme, la creación de campañas publicitarias, el permiso por puntos, un mayor control policial y, por último, por la aplicación de sanciones económicas. Asimismo, el estado físico y psicológico del conductor se considera una causa determinante a la hora de que se produzca un accidente de tráfico y así lo han afirmado los conductores encuestados. Del estudio se deduce que las sanciones económicas son la manera más ineficaz de reducir los accidentes frente a cuestiones tales como la mejora del estado de las vías en cuanto a señalización y firme.

 

Según el estudio, los conductores españoles entienden que los accidentes viales se pueden evitar y que la educación en esta materia es clave para luchar contra esa lacra social. Sin embargo, la gran mayoría opina que durante el periodo escolar la Educación Vial es escasa y que la formación que recibieron en la autoescuela tenía poco contenido sobre accidentes de tráfico, y consideran que si se tuvieran que pasar de nuevo el examen teórico de conducir tendrían problemas para superarlo. También ha quedado bastante patente que los encuestados consideran que la Educación Vial debería ser permanente y continuada en el tiempo y no algo que se limite al periodo de formación de las autoescuelas.

El acto contó con la presencia de Juan Manuel López Iturriaga, exdeportista y socio-gerente de Makeateam, María Jesús Magro, directora general de la fundación José Pons, Eugenio de Dobrynine, director de Asesoría Jurídica de Comisariado Europeo del Automóvil, Roberto Durán, vocal de Seguridad Vial del COPM, y Raquel Navares, directora general de Pons Editorial.

Roberto Durán ha realizado el análisis de los datos, «que ofrecen un perfil medio correspondiente a un varón, con muchos años de experiencia y que conduce entre 10.000 y 25.000 kilómetros anuales. En ellos hemos encontrado una preocupación creciente, presente en el 61% de los encuestados, por la formación, causa por medio de la que explican buena parte de la accidentalidad. Estos conductores consideran que la Educación Vial recibida en el colegio es insuficiente y que la formación posterior tampoco alcanza el nivel deseable; y entienden que una mejora de esa formación puede actuar como una medida preventiva contra la siniestralidad».

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